El vídeo de presentación es una buena forma promoción de nuestra revista Más Que Salud.

Los vídeos gustan, sólo hay que ver cómo se inundan las redes sociales y se colapsan nuestros whatsapp día tras día.

La viralidad también es un término que leemos fácilmente en los blogs de marketing. Un contenido se convierte en viral cuando le damos al público una información interesante en el contenido y en el continente. El desarrollo tecnológico ha sido propicio para el desarrollo del vídeo como un continente fácil de compartir y de ver. Es el único medio que combina texto, sonido e imagen. Se sabe que el cerebro emocional es más sensible a la imagen y al sonido respecto al texto. El vídeo es una buena herramienta de comunicación que cuenta una historia y atrae la curiosidad del público general.

En la Agencia de Comunicación Ana Espadas elegimos la mejor herramienta para comunicar los mensajes de nuestros clientes. En Más Que Salud hemos realizado una serie de vídeos que nos permiten presentar la revista. Queremos compartir contigo nuestra receta para conseguir que un vídeo se convierta en viral.

 

 

 

 

¿Qué necesita tener un vídeo de presentación  para convertirse en viral?

  1. Un contenido claro.

Un vídeo tiene que contar una historia, con una presentación, un desarrollo y un final. Nos tenemos que plantear qué mensaje queremos transmitir y qué queremos que los receptores perciban. Algunas de estas preguntas nos ayudan a enfocar el contenido: ¿Para qué queremos el vídeo? ¿Qué queremos transmitir? y ¿A quién?

Según nuestra experiencia, los contenidos más virales son aquellos en los que la gran mayoría de las personas se identifican: el amor, la compasión, el éxito o el miedo.

  1. Transmitir emociones.

Sabemos por las investigaciones sobre el cerebro humano que las emociones influyen en nuestras decisiones y quedan grabadas en la memoria en mayor medida que la información racional. El uso de las emociones para transmitir información es un recurso que también se puede utilizar en los vídeos. La combinación entre imagen y sonido favorece la transmisión de emociones. El tono de voz comunica un 60% más información que la palabra en sí mismo. La música ha acompañado al ser humano desde hace miles de años y es un elemento que favorece la predisposición del receptor a sentir las emociones.

  1. Ser breve.

Un vídeo tiene que contar una historia. Cada receptor entenderá el contenido de la historia en función de su propia experiencia y conocimiento. Ser breve supone tener la capacidad de transmitir en unos segundos información de interés al receptor. Los videos breves son más virales cuando necesitan de un menor esfuerzo para ser vistos y entendidos.

  1. Una buena producción.

La calidad del vídeo también nos informa sobre la calidad del mensaje. Salvo en casos muy excepcionales en los que el receptor prefiere un vídeo casero, una buena producción nos permite transmitir una mejor imagen y sonido.

  1. Promocionar el vídeo en un soporte que llegue fácil y rápidamente al mayor número de personas.

Los soportes más utilizados son twitter, Facebook y whatsapp. El mejor soporte es donde se encuentra el cliente.

Las marcas necesitan sorprender a sus clientes para poder captar su atención. El vídeo es una buena herramienta. Aquí te dejo un vídeo de Más Que Salud. Quieres captar la atención de tu cliente, pide cita en https://anaespadas.es/contacto/

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