En comunicación el mensaje es el Rey.

En comunicación el mensaje es el rey, eso nadie lo discute, un mensaje es aquello que se transmite a través de algún medio.

El mensaje es el contenido de la comunicación.

 Como agencia de comunicación tenemos dos grandes campos :la creatividad por un lado ,la imagen, y por otro el texto.

La imagen tiene el doble objetivo de captar la atención del receptor y transmitir un mensaje.

La transmisión del mensaje requiere a su vez que el receptor se identifique con lo que ve e informe sobre una acción.

¿Cómo se elabora un mensaje?

Para contestar a esta pregunta necesitamos conocer los siguientes elementos.

En primer lugar ¿Qué necesidad quiere cubrir la empresa?

Según el tipo de necesidad se estimulará una parte distinta del cerebro. Las necesidades biológicas como comer y dormir estimulan al cerebro primitivo también llamado cerebro decisor.Las necesidades de pertenencia al grupo estimulan al cerebro emocional y las necesidades racionales como el precio estimulan al cerebro racional.

En segundo lugar, ¿analizar qué posición tiene la empresa respecto a esta necesidad?

Se posiciona como una empresa líder o como seguidora?

En tercer lugar ¿qué situación se encuentra la empresa para conseguir sus objetivos?

La empresa es conocida o no entre su público objetivo?

Busca visibilidad, transmitir confianza o simplemente reconocimiento?

¿Por qué el mensaje necesita una buena imagen que le acompañe?

Vivimos en una sociedad en la que cada uno de nosotros recibe miles de imágenes a diario. El cerebro primitivo o decidor entiende mejor el mensaje cuando es visual, por lo que utilizar una imagen le ayuda a procesar mejor la información.

Por esa otra parte la imagen también permite captar la atención del receptor. Esto qué significa. Sencillamente que la imagen estimula las conexiones neuronales de esas personas.

¿Cómo lo conseguimos? Principalmente conociendo el perfil cualitativo de nuestros clientes objetivo.

Cuando empecé mi carrera, hace ya unos cuantos años, nos centrábamos en conocer el perfil cuantitativo de nuestro cliente objetivo. Por ejemplo el género, la edad, los estudios o el estado civil. Sin embargo la alta cantidad de marcas, productos y campañas hacen que nuestro cerebro tenga más dificultades en centrar su atención.

En otras palabras ahora en análisis demográfico y económico es insuficiente. Para estimular las conexiones neuronales, necesitamos que el receptor se identifique con el producto y/o la campaña de comunicación. Para simplificar, podemos decir que los productos que cubren necesidades biológicas permiten una estimulación más rápida que el resto.

Cada vez más, las empresas necesitan conocer en qué punto su producto se identifica con una necesidad y cómo hacer para que el receptor entienda y perciba el mensaje.

¿Y qué pasa con las campañas de comunicación que se basan en el precio?

El precio estimula el cerebro racional, lo que influye, incide en la memoria del cliente, ya que recordamos mejor emociones que datos.

Como ves hay una clara diferencia entre informar sobre la creación de un producto y comunicar la existencia de ese producto para que los clientes se sientan identificados.

En comunicación, el mensaje es el rey ¿quieres comunicar o sólo informar?

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